jueves, 19 de agosto de 2010

The End?



Goodbye! Arrivederci! See ya! Au Revoir! Later!
Se acabó lo que se daba, y dio para el cuento de nunca acabar.

Y hasta aquí puedo leer de un año en la bota,
¡qué cabrón el tiempo cuando se agota!
Así que al fin llegó el adiós en este agosto de página en blanco,
para los que se van, suerte; para los que volvimos... un abrazo.
Ha sido intenso, y muy desigual mi narración bloguera,
¡qué distinto se ve todo desde la trinchera!
Vivir, vivir, vivir era la única estrategia de juego,
¡qué difícil escribir cuando todo merece un hueco!
Sólo me queda deciros, con cariño superlativo,
a todos los que de la aventura fueron testigos:

Colorín colorado,
en Madrid me reinstalo,
para futuras andanzas
me quedo con las enseñanzas,
me llevo en el macuto
un pedazo dello Statuto.
A pocos pero fieles lectores
les invito a nuevos albores,
la gata vuelve a su tejado,
y lo perfuma con la bruma de este ya viejo aroma romano.

domingo, 15 de agosto de 2010

Soneto incoherente de resurrección.




¡Qué miedo escribir con tanto que contar!
Terminó la Stazione Termini, è vero,
y no salieron palabras de mi tintero
que destapasen emociones envasadas en el mar.

En julio no extrañé el extraño aroma romano,
el aterrizaje al madrileñismo lo cogí con gusto,
pero en agosto se moja la almohada con insultos
para que recuerde y resucite este blog desamparado.

Inauguro otra de mis siete vidas indecentes,
no sé qué será de mí en este año post-traumático
mas ronroneo con ilusión por artefactos insurgentes.

La gata abajofirmante pide desde su tejado
que encuentren la suerte los valientes
¡y que Dios bendiga al borracho de San Erasmo!